jueves, 1 de enero de 2009

Demasiada calma cuando hace falta prisa.


Se hace énfasis en la necesidad de que se cumpla el principio socialista de aportar para recibir, a la vez que se critica la lentitud en la toma de medidas por parte de la dirigencia Cubana


Carlos Morejón Para Kaos en la Red



El que escribe estas líneas es un comunista cubano de 53 años. Creo en la factibilidad de un sistema socialista en Cuba y por ese motivo, durante toda mi vida he defendido esta opción. Los revolucionarios defendemos ideas, recalcaba un compatriota en un comentario en kaos y estoy de acuerdo con él.
No somos fanáticos ni seguidores ciegos de una doctrina o de algún líder. En mi caso, pienso que el socialismo no solo es posible, sino imprescindible para la especie humana. Además es la garantía de la supervivencia de la nación cubana frente al país más poderoso del mundo.
Y en cuanto a los líderes revolucionarios, estoy convencido de la honestidad, inteligencia, valentía y capacidad que han demostrado Fidel y Raúl durante toda su vida.
En ese sentido los admiro y los respeto, aunque como todo ser humano pensante, en ocasiones no haya estado de acuerdo con alguno de ellos y considere que en su actuar político han cometido errores.
No hay obra humana sin errores y la propia naturaleza se corrige constantemente a sí misma.
Creo que la inmensa mayoría de los revolucionarios cubanos pensamos de este modo y defendemos y defenderemos la opción socialista en Cuba. Pero para hablar y discutir de algo debe definirse clara e inequívocamente de qué se habla para luego discutir.
Y es que la definición de Socialismo nunca ha sido clara e inequívoca.
De manera general se entiende por socialismo al sistema socio-económico en el cual predomina la propiedad social sobre los medios de producción. En eso casi todos estamos de acuerdo.
Pero no en cuanto a qué cosa es propiedad social. Para unos es lo que ha existido hasta ahora: Propiedad Estatal.
Para otros es la propiedad colectiva de dichos medios por parte de los trabajadores de la finca, la fábrica o taller.
En éste último caso, el asunto se complica cuando se trata de una escuela, hospital o servicios públicos básicos, en los cuales sería aconsejable una participación del trabajador en la administración de su centro y no una propiedad colectiva, de la misma manera que debiera ser en las grandes empresas de importancia nacional.
Yo, personalmente, soy partidario de estas formas de propiedad colectiva, es decir, la propiedad cooperativa, la co-gestión estado-obrero en las grandes empresas y servicios básicos (conservando el estado la propiedad), además de permitir un espacio para la pequeña propiedad privada y el trabajo por cuenta propia. A esto cabe agregar la participación de empresas extranjeras en asociaciones con empresas nacionales.
Para que esto funcione, debe existir una amplia descentralización de los poderes del estado, pasando la mayor parte de las decisiones a los niveles de base (municipios, consejos populares) y utilizando a su vez al máximo los mecanismos de participación y consulta popular con fuerza ejecutiva, tales como referendos, asambleas etc.
También deberían crearse todo tipo de mecanismos de control, auditoría y revisión por parte de de la sociedad a los distintos niveles. Los niveles superiores de la administración del estado deben a su vez, recibir un impuesto sobre las ganancias de las empresas, productores y servicios que son administrados a nivel municipal y conservar el control administrativo (en co-gestión participativa con los trabajadores) de las empresas, servicios y productores de importancia provincial y nacional.
El estado debería contar con leyes y mecanismos de control que regulen las potestades y faciliten la interacción entre los diversos escalones de la vida económica, política y social del país.
De fundamental puede calificarse el papel del Partido, como vanguardia política de esta sociedad de trabajadores cultos y cooperativos, ya que constituiría la garantía de la existencia de valores humanos superiores en la construcción de la riqueza colectiva.
El parlamento, las asambleas provinciales y municipales del poder popular, los consejos populares y circunscripciones, con la participación decisiva de las organizaciones de masa y bajo el papel dirigente del partido, serían organismos vivos, en perenne y aguda discusión de las diferentes problemáticas de la vida de la nación, en busca de soluciones que saldrían de estas instancias y no de la cúpula del poder, cuya función fundamental debiera ser justamente estimular la administración colectiva de la sociedad por todos los que aportan a ella y con luz larga e inteligencia, guiar a la nación en su interacción con los demás países y bloques de este mundo cada vez más globalizado.
Eso, de manera muy abreviado, es lo que creo debiera ser el socialismo, las soluciones deben aportarlas los trabajadores. Sin embargo, el motivo fundamental de mi participación aquí es otro.
Ayer leí lo que dijo Raúl en la Asamblea Nacional.
Por lo visto, nuestros dirigentes piensan que los trabajadores cubanos podemos seguir esperando tranquilamente a que la dirigencia halle un modo de sacar al país de la profunda crisis económica y social en que se encuentra, con síntomas de convertirse en crisis política de imprevisibles consecuencias.
Un ejemplo de esa calma chicha de los dirigentes cubanos, es el asunto de los millones de hombres y mujeres que en Cuba no trabajan y reciben los mismos subsidios y prestaciones que los trabajadores, jubilados y estudiantes.
No se piense que es una cifra despreciable. El subsidio a los precios de esa pequeña cantidad de alimentos normados, que reciben todos los cubanos, trabajen o no, vale cientos de millones de dólares al año.
A pesar del incremento de la tarifa eléctrica, el estado subsidia en una cifra similar el costo de la electricidad a clientes privados y estatales. También son subsidiados los precios de todos los tipos de transporte público (ese mismo que es tan deficiente), el agua y otros servicios básicos a la población.
El estado da derecho a los servicios de salud a todas las personas, trabajadores (junto a jubilados y estudiantes) o vagos. Los hijos de todos tienen acceso a la educación sin averiguar cuanto aportan sus padres.
Todos los cubanos cuentan con protección policial y son defendidos por nuestras gloriosas FAR, así sean trabajadores o no.
La suma de todos estos gastos para las personas que nada aportan es superior a los 1500 millones de dólares anuales.
Esto no sale del bolsillo de Fidel, de Raúl, de Almeida ni del de Ramiro solamente (porque ellos sí trabajan), sino del bolsillo de TODOS LOS TRABAJADORES cubanos, que sumamos una cantidad apreciable, aunque cada vez menor. Cada día que pasa sin tomar medidas contra esta situación es una bofetada en el rostro de cada trabajador, jubilado, militar y estudiante cubano. Es un insulto a la memoria de todos los caídos por la libertad y el socialismo en Cuba.
Cada tarde que vuelvo del trabajo y veo al gordo bandido de al lado de mi casa echándose fresco en los c...., traficando con cuanta cosa pueda robarse y pervirtiendo a Mahoma en vez de trabajar y oigo a nuestros dirigentes decir que hay que seguir esperando con calma a que ellos encuentren la solución correcta para lograr que la gente trabaje, me parece que alguien se está burlando de mí.
En cualquier país del mundo, excepto Cuba, el que no aporta al presupuesto ni come, ni va al médico, ni tiene casa, ni puede hacer que sus hijos estudien. Qué porquería de sistema tenemos en Cuba que privilegia al vago, al ladrón y al insconciente?
Por qué diablos el gobierno me OBLIGA a mantener a los vagos? Cuando se va a hacer realidad el tan cacareado principio socialista "De cada cual según su capacidad, a cada cual según su trabajo" ? Tengo que esperar otros 50 años?
Insisto que no solo me refiero a los vagos del sexo masculino, sino también a las de sexo femenino. En Cuba el trabajo por parte de la mujer no es obligatorio. Por lo general no se incluyen las mujeres que no trabajan en las cifras oficiales de desempleo.
Por qué yo tengo que ayudar a mantener a la mujer de mi vecino, que no ha trabajado nunca porque no ha querido? Por qué yo tengo que contribuir a pagarle sus tratamientos médicos, su protección policial, su gasto de electricidad si ella no tira un chícharo?
Hasta cuando los dirigentes de este país, en nombre de los más altos valores de solidaridad humana, se van a apropiar de las ganancias de los trabajadores, obtenidas con enormes sacrificios, para repartirlas a los vagos e inconscientes? Esa basura es SOCIALISMO?
Yo se muy bien que la máxima dirigencia de la Revolución está consciente de este problema. Raúl habló de eso en el discurso del 26 de Julio del 2007. Han pasado 18 meses y no solo no han hecho ni c..., sino que ahora plantea que hay que seguir esperando, porque el problema no se resuelve solamente con una ley, debe encontrarse una solución de tipo económico, que obligue a la gente a trabajar.
Correcto. Pero en 18 meses (por poner una fecha de inicio, como si hubiesen descubierto el problema entonces) no se ha adelantado ningún plan, ninguna idea. No se le ha dicho a los trabajadores "vamos a hacer esto y lo otro, con su participación", todo se deja para cuando los dirigentes entiendan.
Cierto que el problema es complicado. Involucra la necesidad de crear empleos suficientes (aún cuando escasea la mano de obra en un montón de tareas), estudiar como eliminar subsidios indiscriminados y gratuidades indebidas. Pero en 18 meses ni un rayito de luz ni de esperanza...Y los ciclones vienen, desbaratan lo poco que tenemos, las casas que llevan milenios sin mantenimiento.
Pero los vagos siguen ahí, incólumes, impertérritos, indestructibles, protegidos y mantenidos por un estado que dice ser revolucionario y de los trabajadores, y que los mantienen, los sanan y los protegen a costa del sudor y hasta la sangre de los trabajadores!!!
Puede concebirse algo más insólito? Puede algún lector extranjero citarme el nombre de algún país de este planeta donde el gobierno OBLIGUE a la población a mantener a quienes ni trabajan ni pagan impuestos?
Es necesario que la dirigencia histórica de la Revolución tome conciencia de la situación actual del país, los trabajadores necesitamos urgentemente ver una luz al final del túnel, un rayito de esperanza, no bastan palabras imprecisas de que se va a trabajar en solucionar los problemas, aunque sabemos que se trabaja muy seriamente para el Congreso del Partido.
Pero hay que bajar a la calle a los centros de trabajo, resulta imprescindible poner a trabajar al pueblo en la búsqueda de soluciones, no brindarle soluciones ya hechas en los edificios del gobierno.
Hay que actuar con rapidez, con inmediatez. Si en los dos primeros años de la Revolución se transformó toda la estructura política, económica y militar del país, con la participación decisiva de los trabajadores, estudiantes y otras capas sociales progresistas, ahora hay que hacer algo similar, si es que queremos salvar el Socialismo y por tanto a la Patria.
Urge terminar con los subsidios indiscriminados, con ese dinero incrementar salarios y pensiones y privar a todos los vagos de beneficios inmerecidos, hasta tanto reformas económicas más profundas y mejor consensuadas puedan ponerse en marcha. Ofertar las plazas laborales disponibles y abrir más capacidades de trabajo por cuenta propia y cooperativo. Incluso, si fuese necesario, es preferible crear el subsidio por desempleo, si es que una persona no tiene trabajo disponible en un momento dado, antes que continuar haciendo lo que hacemos hoy.
El Socialismo tiene que ser la sociedad de los trabajadores, de la gente que aporta riquezas materiales y espirituales con sus manos y su inteligencia. Llamo a los revolucionarios cubanos a debatir estos temas en kaos y en todos los medios y circunstancias posibles.
Es fundamental que la sociedad cubana comience a moverse para resolver sus problemas. Hay que salvar la Revolución, la Patria y el Socialismo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

que decirte amigo mio es muy cierto todo lo que planteas ,yo soy un cubano que abandono en el 2005 de forma legal cuba para radicarse en el uruguay y trabaje desde los 18 años y conozco mucha gente que vive del cuento ,porque vivo en el capitalismo se que esa no es la solucion para cuba ,la solucion es un mejor socialismo mas justo lo que para mi significa trabajar para refundar nuestro pais entre todos y no mantener al lumpen,ese que tanto daño ha hecho.salvemos la patria ,la revolucion el socialismo ,no cometamos los mismos errores del extinto campo socialista que acabo refugiandose en el capitalismo .el cambio es ahora ,un fuerte abrazo revolucionario,no todos lo que nos fuimos somos gusanos y queremos dar nuestro granito de arena .